


¿Cómo despertar el interés del otro?
¿Te gusta un chico o chica y todavía no te ha prestado atención? En éste artículo te cuento las 7 claves para despertar el interés del otro. Todo lo que necesitas saber para que él o ella sólo tengan ojos para ti. Descubre las herramientas que te convertirán en un imán de la seducción a partir de un trabajo personal enfocado en ti.
1. Se auténtico/a.
¿Piensas una y otra vez cómo conseguir despertar el interés del otro?. Deja de analizar y ponte a actuar desde ti mismo, se auténtico. Quítate la presión de tener que gustar y ser alguien “especial” para qué se fijen en ti. No hay una persona igual a otra, ni unos gustos que se puedan “normalizar”. Ser natural te abrirá muchas puertas desde tu propia originalidad.
Deja de estar pendiente de cómo te ven y centra tu atención en ti. ¿Cómo eres?, ¿Qué es lo que te gusta?,¿Cómo es tu forma de andar?, ¿Cómo sientes?… En definitiva reconócete a ti mismo para valorarte en “Stereo Dolby Surround”. Dáte el gustazo de quererte tal y cómo eres a partir de lo que está alineado contigo. Centra tu interés en profundizar sobre ti, y qué es lo que buscas de la otra persona.
Ten las ideas claras y no divagues en los “y si hago esto o aquello”. Que se fijen en ti depende de ti. Una persona original siempre tendrá las de ganar ante una copia de una copia…pues tarde o temprano revelará la verdadera esencia. Cómo personas estamos habituados a ver patrones así que sorprende desde tu ser ganarás mucho más que llevando un discurso preparado.
Si pretendes conquistar a un corazón hazlo desde la autenticidad. Si quieres conocer más sobre éste punto, te invito a que leas el artículo ¿Cómo ser auténtico?
2. Se proactivo/a.
Ser proactivo es importante en la vida, y también en la seducción. Desarrolla una actitud de hacer y proponer en tu día a día en lugar de esperar que lo hagan por ti. Tirado en el sofá o estando en una esquina de la oficina tomando un te sólo no es la actitud más sexi para que se interesen en ti. Cambia el chip, lánzate a la aventura, aprovecha la ocasión para acercarte a esa persona destacando entre el resto.
Estamos habituados a no mover un dedo y postergar momentos por miedos sin fundamento. No te morderán por hablar con alguien, invitar a tomar acción, o proponer actividades. Todo lo contrario, a las personas les encantan las sorpresas, los retos y las propuestas interesantes que les saquen de la monotonía. Adelántate a la competencia, llévale a una vida alejada de la rutina, de conversaciones banales, o procesos mecánicos.
No hace falta que seas un Sheakspeare o hayas ganado un concurso de oratoria para ser proactivo. Solo necesitas aprovechar el momento presente para poder desarrollar tus acciones. Que estás en una tienda de ropa, consulta a ese chica o chico que te gusta cómo te queda una prenda de ropa. No te quedes con las ganas, cualquier situación es buena para dar rienda suelta a tu imaginación.
Escribe, llama, acciona la palabra del cambio desde la proactividad con propuestas que permiten disfrutar al otro/a de un cambio en su vida diaria y quien sabe si un futuro ligue ;).
3. Sonríe.
Ábrete al mundo con una sonrisa, es una arma poderosa que rompe cualquier barrera. Nadie se fijará en ti si estás lamentándote de su suerte, triste o aburrido en una esquina. El ser humano presta atención a aquella persona que te ofrece un buenos días o se despide de ti con una sonrisa…Sistematiza la sonrisa cómo un elemento a llevar en cuenta en tu mochila siempre, puedes cambiar la realidad de más de uno/a con éste simple gesto.
En el momento que está escrito éste texto, hágase saber, en plena pandemia, tenemos la obligación de llevar mascarilla en muchos sitios públicos, no obstante hay alternativas a ello. Busca ambientes dónde se te permita sonreír sin tener que llevarla puesta: Cafés, terrazas, u otros ámbitos que te muestres tal y cómo eres. En caso contrario agudiza el ingenio, y llévate una mascarilla sonriendo o ingeniosa. La idea es que te permita expresar de forma ingeniosa aún habiendo limitaciones.
Naturalmente habrá momentos en tu vida menos fáciles, dónde por razones varias no te apetecerá estar alegre, son las mismas por las que uno decide no salir “a pescar”. Esos días date un respiro, y entiéndelos cómo momentos de desconexión para elevar la frecuencia.
Lo que tienes que tener claro es que el miedo, la tristeza o la agresividad en nuestros rostros hacen alejar la toma de contacto salvo a excepciones: dependientes, personas tóxicas…Ésta tipología según el libro «Los vampiros de la mente” a la cuál estoy muy de acuerdo, se les describiría cómo “profesionales del suicidio lento y masturbatorio”. Cosa totalmente insana por otro lado.
4. Menos es más
Cuándo conozcas a otra persona si quieres que se fijen en ti, no atosigues, deja aire para que respire. Seguro que conoces el típico que se lanza en una conversación y no te deja ni hablar, te pega una “chapa” que hace que te veas envuelto/a en una conversación sin final monotemática. Hay momentos dónde tienes que saber parar. Las charlas infinitas pueden llegar a aburrir, sea cuál sea el tema que estás hablando aunque pueda parecerte interesante.
Identifica cuándo una conversación está en un momento álgido para frenar… Aléjate de él o ella y emplaza tu cita desde otra circunstancia. La idea es no sobresaturar, crear experiencias buenas sin que el estalle el sistema. Es lo mismo que si tuvieras sexo 24h durante varias semanas al final no apreciarías el “momentum”. Recuerda nuestra vida está hecha de conjuntos de instantes que la hacen mágica.
No frenes el instante ni lo alargues más de lo necesario, el tiempo es el que es, con la práctica lo vas a ir descubriendo. Esto te hará avanzar en el campo de la seducción. Diversificarás en temas y sabrás cuándo dejarles en suspensión o darlos por terminados.
5. Amante de emociones
Para despertar el interés del otro es básico que creas en él o ella un efecto “torbellino” de emociones. Ahí intervienen los 5 sentidos: vista, olfato, gusto, oído, y gusto. Cuánto más puedas desarrollarlos más probabilidades tendrás que se rindan a tus pies.
Recuerda cómo te atrapa la persona que te gusta: Su forma de moverse, el perfume, lo que dice, cómo lo dice, su mirada…. Eso es lo que tienes qué trabajar tú para hacer de ti un imán en la seducción: el gusto por ser una persona completa en la creación de emociones.
Toma en cuenta todos esos requisitos para dejarle con las ganas de conocerte más profundamente. Llévala al terreno emocional con conversaciones dónde intervengan los cinco sentidos, sentir el gusto de cada palabra que digas e imagine cada situación. Aprovecha para mirarle de forma picarona, muéstrate cercano/a y cómplice, sumérgele en un tobogán de emociones para que se pregunte de dónde diantres has salido tú…
Cuándo crees éstas emociones mira juntarlas…Puedes estar en la oficina mirándole mientras le dices medio sonriendo… ¿Te apetece tomar un café de nuestra “fantástica” máquina?, y sin más le cuentas…éste fin de semana tenía previsto irme a la montaña, me han dicho que tu eres una asidua a hacer snowboard, es una pasada ¿es así no?. Cómo ves incorporas elementos de complicidad (nuestra), sus gustos (snowboard), y te interesa que te hable de sus emociones (es así no)…Fácil, completo y directo, no busques y siente la emoción 😉
6. Despierta su parte irracional.
Deja de comportarte cómo un vendedor, no cuentes historietas de cuándo pillabas la moto por primera vez…No interesa lo que hiciste, ni con quien, el currículum que tengas de tu pasado guárdalo en el baúl y bajo llave.
Lo mejor que le puedes ofrecer al otro es ese momento que tenéis entre los dos. Ese instante en que os habéis encontrado, y desde ahí abordas todos tus pasos. Estás en el tren, en un parque, en la calle, en un bar, dónde sea…
Crea elementos que saquen de la rutina a tu encuentro, no le sometas a interrogatorios, juega con él o ella. El juego lo es todo, busca crear tensión emocional, que olvide esa parte racional que todos tenemos. Si consigues que participe del juego, crearás un ambiente de familiaridad dónde no cuestione tu espontaneidad y profundice en terrenos reservados a personas de su zona de “confort”.
Juega, juega y otra vez juega, cualquier tema puede crear tensión sexual, sólo utiliza tus 5 sentidos. Un buen ejemplo de ello es Marlon Brandon en la pelicula salvaje: Con solo una moneda, unos movimientos lentos acompasados y una mirada intensa sabe sacarle todo provecho;)
7. Crea complicidades.
Para despertar el interés del otro necesitas que se identifiquen en ti, crear complicidades mutuas. Hazle participe del momento, interactúa con aquello que te aporte a partir de estar presente y vivir una experiencia.
No tengas miedo a los encuentros, son grandes oportunidades de crear situaciones a tu favor. Son pocos los que aprovechan cualquier ocasión para conocer gente y establecer una sintonía a través de interacciones. Obsérvalo cómo un reto ilusionante, el camino natural a seguir creando conexiones en tu misma línea.
Si eres viajero y vas sólo/a es fantástico, una gran opción para crear nuevos vínculos. Hay numerosas personas que viajan sin acompañantes a las que puedes dirigirte en diferentes situaciones. En mi caso, ser asiduo de los viajes en solitario me ha permitido conocer infinidad de gente. Hablar con una chica que se encuentra mirando un mapa y al cabo de 5minutos cenar con ella es posible si le pones interés.
No busques excusas y observa en tu entorno, hay mucha gente que está deseosa de que le den alternativas a su vida, sólo tienes que conectar desde ti mismo y la escucha.